martes, 15 de diciembre de 2015

Diez pecados de la cumbre del clima de Paris.

Vaya por delante que los acuerdos alcanzados en la cumbre del clima de París son mejor que la nada. Un hecho, incluso histórico, por el que la mayoría de las naciones han llegado a un acuerdo en el que se comprometen a reducir emisiones de una forma más o menos seria durante las próximas décadas.

Histórico acuerdo en la Cumbre de París contra el cambio climático
Según cuentan, un momento histórico.
Pero no ocultemos tampoco que esconde numerosas carencias. Las resumo en varios apartados, expuestos básicamente en 10. Los pecados mortales que comente la comunidad internacional contra la tierra.

En resumen:

1. Confundir la ecología con un sistema de calefacción.

La visión que se tiene sobre la temperatura de la tierra y su calentamiento es pueril. Se habla de evitar el calentamiento en 2 grados, como si dispusieramos de un termostato que se puede accionar y apagar a placer. Pero es absolutamente mentira que el ser humano tenga una capacidad de controlar la temperatura en parámetros tan precisos y, encima, sólo sobre la base de la reducción del CO2. Un carbonocentrismo que es en definitiva una tomadura de pelo pues los factores influyentes son muchos más, desde cambios en los mares hasta la influencia del sol, pasando por otros cómo la cobertura vegetal, sólo valorado por su relación con la capacidad de absorción de carbono.


Sociedad De Consumo, Ver La Televisión

2. No aclarar si existen intereses espurios.

Análisis, Pagar, Empresarios, ReuniónPuede transmitir incluso da la sensación de que pudieran existir no pocos intereses ocultos en estos posicionamientos. Si las interpretaciones negacionistas vienen apoyadas, supuestamente, por intereses de los agentes económicos en los sistemas energéticos clásicos, ¿quien o qué puede haber detrás de lo que se está planteando: ni más ni menos que todo un cambio productivo a nivel planetario?. Una posibilidad de negocio futuro de miles de billones de euros. El auténtico gran negocio del siglo XXI. Algo que se empieza a cuestionar desde planteamientos críticos como es la acusación de mercantilización del clima.


3. Proponer unos planteamientos poco creíbles y realizables.

Claro que la mayoría de los críticos lo son por cuestiones prácticas y no sólo filosóficas. Según la mayoría de los planteamientos ecologistas y de destacados científicos las pretensiones sobre calentamiento son, cuando menos, poco optimistas. No parece creíble que se vaya a conseguir bajar de los dos grados, para ello necesitaríamos que la descarbonización se produjera antes del 2050.

Desierto, La Sequía, Deshidratado, Suelo Arcilloso

4. Minimizar los efectos de la deforestación.

Mujer, La Cabeza, Globo, Internacional, GlobalLa interpretación casi monográfica de la carbonización y la propuesta de descarbonización parece ser la única receta, pero ¿qué hay de otros factores influyentes? Por citar uno relacionado con la alta tasa de carbono nos quedamos con la pérdida de masa vegetal. No parece que exista intención real de atajar de lleno el riesgo de deforestación, que es extremo. Los países tropicales van a seguir acabando con los bosques a un ritmo tan grande que la vegetación no va a ayudar ni tan siquiera esa descarbonización, cuanto ni más a prevenir otros problemas derivados como la desertificación o el deterioro de suelos.


5. Olvidar la influencia medioambiental de la sociedad de consumo.

Tampoco parece efectiva la política de recomendaciones gubernativas. ¿Dónde quedan otras prácticas que no sean cambiar los malos hábitos industriales? Se olvida, por ejemplo, el consumo, que es clave para evitar el cambio climático. Un ejemplo, si no consumiéramos productos que contuvieran aceite de palma evitaríamos la deforestación de inmensas zonas selváticas. Es necesario un etiquetado adecuado que indique cómo ponemos en riesgo el medioambiente con determinadas compras. Eso por citar sólo un caso.

Frutas, Mercado, Los Alimentos, Fresco

6. Ignorar otros escenarios posibles.

Océano, Olas, El Agua, Mar, AzulY, para carencias, una esencial, científica, y es que los acuerdos de París olvidan que quizá el principal riego en la evolución del clima para el planeta es la interrupción de la circulación termohalina, con especial acento puesto en la corriente del golfo. Queda claro que los planteamientos científicos de la cumbre de Paris no contemplan, ni por asomo, interpretaciones glaciacionistas. Que Dios nos pille confesados si estas estuvieran en lo cierto.


7. No crear mecanismos efectivos de cumplimiento.

Silueta, Globo, Promesa
Pero no es la única limitación de la cumbre de París. Una de las más criticadas es que los acuerdos no proponen mecanismos de control efectivos, lo que deja en manos de los países su cumplimiento. ¿Alguien piensa que los países en vías de desarrollo van a invertir en un sistema de producción caro, como el que se basa en energías alternativas? o ¿si van a dejar de explotar recursos tan asequibles como los madereros por evitar cuestiones tan dubitativas? Es en la falta de competitividad de prácticas limpias donde se impone la realidad: que las prácticas extractivas son más baratas.


8. Seguir sin dar valor añadido a la ecología.

Paprika, Amarillo, Naranja, Rojo, Hortalizas, AlimentosY es que, en definitiva, se olvida a los países de economía arcaica. Aquellos que están en vías de desarrollo. Si no se logra que el cambio del sistema sea una vía interesante para el desarrollo, y no una para mantenerlos en el subdesarrollo, no se logra nada. De esta forma nunca se podría ser eficaz en los planteamientos intentando hacer más rentables las prácticas limpias. Es decir, dotar de valor añadido a la ecología. 


9. No incidir en la contaminación del planeta.

Humo, Fumar, Chimenea
Otro olvido tremebundo. ¿Alguien ha oído hablar de la contaminación en la cumbre de una forma seria? ¿Qué hay de los vertidos en general, del envenenamiento del agua, de la condena de sed a millones de habitantes? ¿Se soluciona sólo con descarbonización?


10. Desentenderse de otras cuestiones humanas.


Y enlazamos con la décima y última carencia que tiene esta visión sobre el clima y es que no se plantean cuestiones asociadas a la influencia antrópica en el clima ni por asomo. Por poner un ejemplo sencillo, uno de los problemas de fondo es la superpoblación. Sencillamente no cabemos en la tierra y ésto no es una cuestión de sistema productivo, sino de simple espacio vital. Curiosamente las políticas de control de la población son en la base cuestiones ecológicas.


Humanos, Siluetas, Pierna, Tierra, Globo
Imágenes extraidas de https://pixabay.com/, salvo enlaces.
En definitiva soy tremendamente excéptico sobre la profundidad del cambio en materia medioambiental en esta cumbre de París. No obstante es un paso, habrá que seguir andando.

lunes, 7 de diciembre de 2015

Ecología para no iniciados

Habida cuenta de la influencia, inquietudes y curisiodades que despierta la evolución del clima, en especial por el interés que toma a través de las llamadas cumbres del clima, parece necesario avanzar en campañas divulgativa al respecto.
La ecología es sólo una rama de la biología que se encarga de relacionar a los seres vivos con el medio en el que viven, aunque poco a poco está cobrando más fuerza incluso que la propia biología, ya que empieza a relacionarse con aspectos propios de las ciencias humanas como la historia, la política o incluso la economía.
No me cabe ninguna duda de que se trata de la ciencia del futuro ya que el hombre empieza a pensar en términos ecológicos, aunque epistemologicamente está prácticamente en pañales.
En tiempos en los que el hombre puede viajar en el espacio, crear casí la vida a través de la genética, dominar la economía y desarrollar una sociología compleja, puede sorprender que no tengamos ni idea de aspectos climáticos y sobre todo que no podamos vislumbrar su evolución futura, por lo que intentar indagar en ello resulta complicado, a la vez que apasionante.
A modo de inicio quisiera de una forma no demasiado compleja mostrar las principales teorías sobre el cambio climático para si pudiera servir de ayuda a los que cada vez más manifiestan su interés por la evolución de la tierra en términos ecológicos.
En cuanto a la interpretación de los cambios encontraríamos, por tanto, tres teorías.

1. Crisis, ¿qué crisis?
No me cabe duda que el título de esta magnifica obra musical de Supertramp nos define la primera visión sobre este tipo de teorías curiosamente extendidas más de lo que se pueda pensar. Basan su planteamiento en la negación del cambio climático y en que el calentamiento global es sólo una ficción.
Un icónico disco de los 70 refleja a la perfección esta visión
Aunque no lo creamos hay no pocos científicos y divulgadores que apoyan este tipo de visión y no es infrecuente encontrar artículos en base a estas tesis.
A modo de resumen, la tierra ha vivido anteriormente situaciones de temperaturas más altas en otros momentos de la historia -hablamos de miles de años- por lo que nos encontramos en una situación que tiene demasiado de alarmista. Otros síntomas como el deshielo del polo norte es circunstancial, pues por ejemplo el hielo en el polo sur incluso se ha incrementado. Del mismo modo llega a ver incluso efectos positivos en la existencia de un alto índice de Co2 en la atmosfera, sobre todo para la agricultura. Para acercarnos a esta visión aconsejo el artículo enlazado más arriba, firmado por Matt Ridley y Benny Peiser que no dejará indiferentes a nadie.
El núcleo principal de esta teoría se ubica institucionalmente en la Fundación para políticas del Calentamiento Global, GWPF, -por sus siglas en inglés- y se muestra como una entidad poderosa y con apoyos a veces serios como el de reputados científicos que apoyan estas teorías.

2. El armegedón climático.
En el polo contrario analizamos las teorías que afirman la existencia de un cambio climático, aunque a veces, sólo con observar las instituciones que se encuentran detrás de las formulaciones teóricas podemos extaer elementos de análisis bastante interesantes e incluso intenciones e ideas conspiranoicas como la de aterrorizar a los pobres humanos, que puede que resulte interesante políticamente.
Poco menos que se nos plantea la destrucción de la tierra.
Curiosamente el poder militar y el poder financiero, Pentágono y Banco Mundial, se han unido a la hora de apoyar una teoría lo suficientemente convincente para que entrever que sobre la tierra planeé la más completa destrucción. Ha sido a lo largo de estos últimos años cuando han surgido estas voces, lo que ha llevado a las naciones a pasar a la acción.
Pero ¿es la alarma real o es una estrategia de los países desarrollados para que los subdesarrollados sigan siéndolo merced a la necesidad que se plantea de llevar a cabo un cambio en el modelo productivo?
Las interpretaciones sobre la existencia de intereses ocultos afloran por doquier. Algunos ven que la única forma de acabar con las emisiones es limitar a los paises emergentes su posibilidad de desarrollarse por medios convencionales, a través de energías tradicionales y fábricas contaminantes, que llenan la atmosfera de CO2 y la seguirían llenando hasta extremos inimaginabes. Toda limitación es poca, pero supondría una ventaja para los países desarrollados, mas aptos para asumir cambios.
No afirmo estas reflexiones, sólo las expongo para observar la complejidad del tema y sus consecuencias políticas. El caso es que esta visión es la que se ha instalado en todos los países y su máximo exponente es la sucesión de cumbres del clima que se han desarrollado y en especial la de París, donde todos parecen ponerse de acuerdo en la base del problema y en la esencia del mismo. Grosso modo, que se está produciendo un calentamiento global del planeta y que en ello influye la mano del hombre y sus fábricas que emiten niveles de CO2 nunca vistos que podrían llevar al crecimiento del nivel del mar y la desaparición de inmensos territorios costeros.
Nos encontramos ante la teoría principal, asumida por todos los gobiernos, pero ahí no acaba todo. Hay más.

3. La edad del hielo.
Escasamente apoyada por los gobiernos e instituciones y con poca visibilidad una interpretación diferente parece contar con cada vez más apoyos intelectuales, Particularmente para mí es una toería que cuenta con interesantes aportaciones y que hay que tener muy en cuenta sobre el devenir de la tierra. 
Ya he escrito mucho sobre este tipo de teorías en este mismo blog y a estos artículos me remito. La base es que la tierra cuenta con una especie de tope natural que evita que el calentamiento global supere determinados niveles. Es decir, la temperatura global del planeta puede subir, pero nunca lo hará a niveles catastróficos.
Este freno es la llamada circulación termohalina de los mares cuyo máximo referente es la corriente cálida del golfo, que permite que el atlántico norte sea un oceano más calido de lo que le correspondería por su posición en el hemisferio. Claro que esta calidez puede desaparecer y el deshielo del polo norte produciría la desaparición de las corrientes calidad y el inmediato enfiamiento de la tierra, con la extensión de la superficie helada por todo el hemisferio norte, especialmente Europa y el paso a lo que conocemos como una nueva glaciación.
Nueva edad hielo Tierra
Un artículo muy recomendable para introducirse en esta teoría. 
Es decir, nos encontraríamos en un periodo preglacial, cálido, que genera el calentamiento global hasta hacer desaparecer la circulación termohalina tras lo cual vendría una nueva etapa de hielos. Así, el calentamiento es sólo la antesala del frío más extremo.
Existen estudios muy interesantes al respecto, que añaden nuevos factores que influirían en esta evolución, e incluso ajenos a cuestiones referidas en este apartado.  Nos llevarían a la edad del hielo otros factores como la incidencia del sol,
Como vemos, la situación es muy complicada y a la vuelta de la esquina podríamos encontrarnos con un complejo panorama en el que el frío, y no el calor, sería el protagonista del clima en la tierra. 

Usted opina.
Queda de manifiesto que en última instancia no tenemos ni idea de lo que va a pasar, aunque la mayoría seamos conscientes de que algo está pasando e incluso haya movilizaciones para forzar a su conocimiento. En cualquier caso podemos resumir las teorías existentes o predicciones en tres opciones que se derivan de los planteamientos expuestos que ante una pregunta sencilla nos ofrece tres respuestas.
¿Qué ocurrirá con el clima en el futuro?

A. Nada.
B. Calor extremo.
C. Frío extremo.

Dejo a su elección la solución, ¿la respuesta? dentro de unos pocos cientos, quizá miles, de años. Las cosas de la ecología son así. Por ello es una ciencia tan compleja, aunque es necesario tenerla cada vez más en cuenta. Las repercusiones de su evolución no son moco de pavo y hay que estar preparados. En cualquier caso no se alarmen, sólo corremos riesgos como especie, nunca personalmente pues será difícil verlo en nuestras generaciones. Sólo podremos intuir algunos efectos y extraer conclusiones, sobre todo una: parece que la tierra es un sistema batante más delicado de lo que se suponía y resulta poco conveniente trastocar aún más estas cosas del clima. Dejemos los ecosistemas desarrollarse naturalmente, evitemos las emisiones excesivas y respetemos la cobertura vegetal. También desarrollemos la ciencia de la ecología y quien sabe si alguna vez llegaremos a controlar estas cosas de la climatología. Creo que llegaremos, aunque esperemos que sea para bien y no como una nueva vía de control del poder. Nuestra tierra se lo merece. 

miércoles, 2 de diciembre de 2015

La verguenza del cambio climático y la cumbre de Paris

Podría hablar de temas de importancia, que la tienen, y que son motivo de preocupación en diferentes ámbitos de la actualidad. Por quedarme en mi país, España, estamos viviendo una especie de golpe de estado civil por parte de unos pocos en una región a la totalidad del país al pretender arrogarse unos derechos que no tienen ni les corresponden, envolviéndolo además en un falso halo de democracia. No se sabe qué es peor si la falsedad, la arrogancia, la apropiación indebida de derechos civiles o cualquiera otra de las injusticias que conlleva. Con todo y con eso, son cosas poco importantes.
Podría hablar también del terrorismo en la última oleada de atentados que ha sacudido el mundo y que dibujan un panorama de barbarie, donde los más puros principios de civilización se ven menoscabados en un panorama de guerras, intereses espurios y estrecheces intelectuales que nos llevan a una de las peores situaciones que ha vivido la humanidad desde la segunda guerra mundial, pero creo que, con todo, es cuestión de hablar de cosas verdaderamente importantes.
En efecto las personas tenemos varias dimensiones, Como integrantes de un país, como miembros de una civilización. También como individuos libres o como género, todos estos ámbitos con sus problemas más o menos graves. Sin embargo, por encima de todo tenemos un componente de pertenencia a algo superior, que es una especie, el ser humano, la cual no tiene sentido sino es dentro de un ambiente, que en nuestro caso es la tierra. Es ésta una pertenencia que está por encima de cualquier otra y que muchas veces omitimos, cuando ponemos el grito en el cielo ante cuestiones de genero, nacionales, civilizatorias u otras. 
Señoras y señores, ante ustedes el mundo, el ser humano y el medioambiente, en el cual nos movemos.
Pero creo que sencillamente no tenemos conciencia de seres humanos.

El hombre, ser humano sobre todo.
Parece que toda concienciación al respecto es poca y que deberíamos hacer esfuerzos en fomentarlo. Nos jugamos la existencia de la especie.
Tengo que decir que muchas veces yo mismo reniego de mi condición de ser humano y creo que lo mejor que podría pasarle a la vida en abstracto es nuestra extinción como especie. Nadie debería preocuparse, la vida seguiría y probablemente mucho mejor de lo que es ahora, pero me queda la esperanza de que algún día el ser humano adquiriera una dimensión diferente más respetuosa con los demás y con la casa común en la que nos encontramos. Todo empieza por plantreárselo.
Nuestro planeta vive un creciente calentamiento que está originando fenómenos ya bien visibles por todos. Por desgracia, el cabio climático está empezando a matar y es esa la única forma en la que parece que nos enteramos de las cosas, cuando fenómenos novedosos generan desgracias que hacen que fallezcan cientos de personas. Y ahí están reunidos todos los países a fin de solucionar el problema, pero la situación es compleja y los intereses mezquinos manifiestos. En Paris, en la cumbre del clima todos los líderes convienen en que hay que limitar las emisiones de Co2 al medio ambiente y promover la reforestación. Pero la solución no se atisba, pues aparentemente el sol sale cada mañana, no sabemos hasta cuando.

¿Dónde están los frenos a alcanzar soluciones?
Desgraciadamente son muchos y sería interminable la relación. No obstante creo necesario presentar unos cuantos. Algunos derivados de la negociación política y otros sencillamente económicos.
En cuanto a las naciones, valga presentar la desfachatez de algunos países en vías de desarrollo como es el caso de la India, que pese a ser uno de los mayores contaminantes del mundo, pretende hacer caja con el clima. Con esta actitud se espera que el cuarto país en términos de emisión de Co2 llegue a ser el primero en pocos años.
Otro de los principales causantes de la situación EEUU se ha presentado en la cumbre con ampulosas palabras y grandes compromisos, pero ¿es creíble esta posición?. Hoy por hoy parece que no del todo, dado que el propio senado del país ha expresado que no secundará los planes de Obama. Los intereses políticos y económicos podrían primar a los buenos deseos.
Sigamos, China, en este caso la existencia de un senado no sería obstáculo para el todopoderoso Partido único Chino, pero ¿tiene visos de consolidarse un cambio de sistema productivo en un país económicamente obsoleto, basado en un esquema de producción altamente contaminante? China es el primer país emisor de Co2, aunque también uno de los que más sufre su propia devastación. Esperemos que las aparentemente buenas intenciones de su gobierno no encallen en una situación de imposibilidad real. A mí no me cabe duda de que, caso de perjudicar demasiado el crecimiento chino, no se cumplirían los buenos propósitos.
Y ya que estamos en Asia, y entre buenas noticias, conviene resaltar la posición de Japón que es, sin duda, la más honesta de todas. Algo por otro lado lógico en un país soportado sobre islas que no digerirían demasiado bien la subida general del nivel del mar, Pese a todo han presentado la oferta más generosa. Según extraigo del diario 20 minutos, prevén reducir un 26% sus emisiones en 2030 respecto al nivel de 2013 y están dispuestos a destinar 10.000 millones de euros anuales a partir de 2020 a los países en desarrollo para paliar los efectos del cambio climático.  
Del mismo lugar se extrae la posición rusa, dispuesta a adoptar compromisos, e incluso en diarios cercanos al gobierno la situación casi es idílica.

Paises pequeños, pero influyentes.
Pero no sólo los más contaminantes tienen algo que decir en todo esto de la ecología. Es más, se adivina que otros pueden ser notoriamente perturbadores. Tal es el caso de los países productores de petróleo o aquellos que cuentan con extensiones notables de bosques.
Uno que participa de ambas cualidades Venezuela ha mostrado clara su actitud y sencillamente ni se ha presentado en París.
Otro importante, por su extensión de Amazonía, Brasil. no parece haber hecho los deberes, aunque las buenas palabras de la presidenta Dilma Rousseff, alentadas por recientes catástrofes, no parecen tener un atisbo de credibilidad.
Y es aquí donde las posibilidades de acuerdo hace precisamente aguas: todos los países selváticos, tanto americanos como asiáticos, sencillamente ignoran los problemas que supone la desaparición. Iría país por país, pero vaya aquí la lista de los países con mayor deforestación.

Extraido del blog
http://aireqrespiro.blogspot.com.es/2012/12/datos-sobre-deforestacion-en-venezuela.html

Cómo vemos ubicados en áreas boscosas de Oceanía, Africa, América y Asia, e incluídos países avanzados como Australia. Y es que nadie parece dispuesto a perder los beneficios de la tala de los bosques.
Hay otros que no pueden perder nada, por ser desiertos, como muchos de los productores de petróleo, y sencillamente no dicen nada. Tampoco es cuestión de poner en cuestión la esencia de sus riquezas, los combustibles fósiles.
Así, visto con perspectiva, la impresión global es bastante negativa y, pese a ser urgente el cambio de actitud, esta podría llegar tarde y no con la suficiente fuerza cómo para conseguir resultados. Las buenas intenciones de algunos países podrían ser insuficientes. Entre ellos la Unión Europea que aboga por un cambio en el sistema productivo que produciría un recorte en las emisiones, por más que el efecto de la vegetación desaparezca con los bosques.

Intentos estériles.
Así pues, la buena intención china o la decidida postura política europea en cuanto a reducción de emisiones puede ser sencillamente insuficiente. La carencia de una decidida política de lucha contra la deforestación es otra limitación porque es necesario no emitir Co2, pero también lo es no preservar aquello que lo puede absorver, los árboles. Sobre esto no estoy escuchando nada en la cumbre de París, ni nada se va a lograr, estoy seguro. Los gobiernos europeos o el chino no van conseguir nada con sus buenas intenciones, pero nada de nada, y como muestra un botón.
Actualmente uno de los principales motivos localizados y evitables de deforestación es la expansión de la producción de aceite de palma en las junglas africanas o asiáticas. Amplias áreas de esta planta sustituyen a la jungla, dado su enorme potencial económico. Contra ésto no sólo no se han posicionado los gobiernos citados, sino que ¡Oh sorpresa!

Importaciones de Aceite de Palma africana - 2009/2010 - 2012/2013 (Miles de Toneladas) 2012/2013*

País          2009/10        2010/11          2011/12       2012/13          % del total

India           6.603          6.661              7.473          8.500                  20,7
China          5.760          5.711              5.841          6.500                  15,8
U. E.           5.438          4.932              5.618          5.800                  14,1
Pakistán      1.989          2.064              2.218          2.260                    5,5
Malaysia      1.283          1.593              1.850          1.645                   4,0
EE UU           994             980              1.032          1.247                   3,0
Egipto          1.174          1.277              1.204          1.075                   2,6
Bangladesh     951             996                984          1.050                    2,6
Singapur         435             656                854             775                    1,9
Irán                548             634                610             630                    1,5
Otros          10.038         10.789            11.052        11.540                 28,1

* datos extraídos de la conferencia munidal del sector palma africana, Bogotá, Colombia, Marzo de 2015.

Tanto China como la U.E son dos de los principales consumidores. Sólo me queda añadir, y volviendo a la catalogación inicial, que como español, como ser civilizado de la avanzada Unión Europea y cómo ser humano, siento la más absoluta vergüenza de observar como dos de los máximos adalides de las medidas ambientales en la cumbre de Paris se encuentran entre los tres primeros importadores de aceite de palma del mundo. El primero es La India, pero bueno, a ellos no se le puede reprochar hipocresía. Así que, japoneses, idos juntando un poco más que os vais a quedar sin espacio.

Reinicio

¡Cuanto tiempo sin venir por aquí!
Llevaba algunos meses sin visitar mi propio blog, desde la primavera pasada, y he descubierto con satisfacción algunas tendencias sorprendentes. El número de visitas ha experimentado una evolución alcista sin tocarlo. Es decir las entradas antiguas despiertan algún interés y hacen que el número de lectores del blog crezca sin escribir. Tampoco hablamos de una cosa bárbara, pero, al fin y al cabo, es una tendencia positiva. Máxime cuando la temática del mismo no tiene ningún hilo conductor definido y deriva en una especie de cajón de sastre con temas variopintos sin cohesión interna. Sencillamente escribo cuando y de lo que place y eso no es obstáculo para que en este espacio virtual que supone la red vaya teniendo algún seguimiento creciente.   
Claro que eso puede como mucho mantener algo mi ego creativo, pero tampoco cristaliza en ninguna otra satisfacción más material que pueda posibilitar una mayor dedicación a la escritura, que en general tengo bastante abandonada. Debería escribir alguna novela o libro que me permitiera evolucionar como escritor, pero en definitiva hay que ser realista y convencerse de que nunca llegaré a ser un escritor reconocido, ni aún uno malo que al menos pueda malvivir de su oficio, como al menos antes me permitía el periodismo. Tampoco uno malo que pueda forrarse de no se qué extrañas ocurrencias, que los hay. Yo, al fin y al cabo no puedo dedicar el tiempo necesario a hacerlo, dado que hay que subsistir y buscar de qué vivir, dejando las cosas de la letra para cuando haya que decir algo importante en realidad. Y creo que ha llegado ese momento, el de hablar de cosas importantes y no de naderías. Un momento que es ya porque la situación en la que nos encontramos es totalmente dramática. Hablo del clima.
Tras el agradecimiento a los lectores por entrar de vez en cuando al blog, aunque sea sin conocimiento de causa o de persona, voy a centrar la siguiente entrada a hablar del cambio climático. Espero que sea de vuestro agrado, aunque el tema y la situación no lo sean. En cualquier caso gracias por todo, creo que no merezco tan grande honor.